Técnicas para estirar o encrespar las pestañas

Lifting y ondulado de pestañas: 2 técnicas para encrespar o estirar tus pestañas

Si eres fan de las pestañas largas, curvadas y naturales,  sin embargo te encrespas las pestañas con miedo ya que se pueden cortar, alguna de estas técnicas podrían ser tu opción. Se trata de un encrespado o estiramiento de tus pestañas, con ésta lograrás unas pestañas más largas, curvadas y visibles por aproximadamente un mes.

Existen 3 tipos de técnicas que le darán la curvatura que desees a tus pestañas.

1. Ondulado

En este tipo de técnica podemos ver una pestaña curvada en forma de C, es ideal para cuando tienes las pestañas largas  y de este modo quedarán mas naturales, sin embargo si tus pestañas son muy cortitas su largo visiblemente será menor, en caso que te cueste imaginar como se ve este efecto es parecido al encrespado con cuchara.

2. Lifting

Nueva técnica que tiene como principal función alargar las pestañas dejándolas de alto impacto, su curvatura es en L, lo que generara un efecto parecido al del encrespador, por lo cual es ideal para pestañas más cortas, ya que en pestañas extremadamente largas no se verá muy natural.

3. Efecto natural

Este efecto se logra con el mix de ambas técnicas generando una curvatura en U, esta ayuda a casi todo tipo de pestañas dando curvatura en la raíz y estiramiento en las puntas mostrando una pestaña naturalmente larga y onduladas.

¿Te animas a probar alguna de estas técnicas? Te invitamos a nuestros centros Lasertam Beauty para que encuentres ese efecto que deseas y los pruebes en las manos de nuestras cosmetólogas profesionales. Agenda una hora con nosotros haciendo clic aquí.

Cómo conocer el principio activo que necesita tu tipo de piel

Cómo conocer el principio activo que necesita tu tipo de piel.

Somos únicos todos, tenemos gustos distintos, vivimos en distintas ciudades, nos dedicamos a actividades distintas, nos alimentamos de diversas maneras, y así la lista es larga. Es por eso que nuestra piel es única y por ello debemos nutrirla según lo que ella necesite. La piel la podemos dividir según algunas de sus condiciones, ya sea grosor, tacto o biotipo cutáneo. En esta ocasión utilizaremos la medición según biotipo cutáneo en 3 principales como lo son la piel seca, grasa y eudérmica.

Tipos de piel según biotipo

  1. Piel normal o eudérmica: Es una piel con su secreción sebácea controlada, suele lucir perfecta, tiene tendencia a comedones (puntos negros) ni granos, esta humectada e hidratada. No se altera con facilidad ni al frio ni calor, tiene buena tolerancia a los productos.
  1. Piel seca: Visualmente se identifica con falta de brillo y posibles arrugas finas, puede generar irritación con facilidad y poca tolerancia a factores externos. Este tipo de piel se puede identificar de dos maneras:
    • Piel seca por falta de agua: Falta de agua, esta piel luce áspera, sin brillo, muchas posibilidades de arrugas y de infección en rostro, no tolera jabón ni cambios climáticos, muy sensible, presenta tirantez.
    • Piel seca por falta de grasa: luce delgada, poros cerrados, áspera tendencia a arrugas.

Se caracterizan por una disminución del nivel en la secreción sebácea, ocasionando la deshidratación de ésta por una menor protección de la emulsión epicutánea (barrer protectora), disminuida no tolerancia a jabones, suele presentar rojeces y descamación.

  1. Piel grasa: por lo general luce brillante, con poros dilatados, tendencia a color amarillento es gruesa y tosca, presencia de comedones (puntos negros), gran tolerancia a los jabones. Esta se puede clasificar en 3 tipos:
    • Grasa seborreica: mucha secreción sebácea luce brillante
    • Grasa deshidratada: Aumento de secreción sebácea y disminución de agua, una piel opaca
    • Grasa asfixiada: Piel que tiene grasa encapsulada bajo la piel, que presenten mayormente quiste.

Podemos tener este tipo de piel en todo el rostro o en zonas específicas, lo que se le llama piel mixta.

En ocasiones este tipo de piel puede ir acompañada de sensibilidad la que sería una condición extra. Sus síntomas son desde la típica aspereza, descamación y pequeñas grietas hasta enrojecimiento, así como tirantez y picazón constantes. Puede encontrarse pieles alergias, piel frágil y fina, generalizada pérdida de humedad, color rosado traslúcido y aspecto escamoso.

Es muy importante que nos informemos de nuestros tipos de piel para saber que cosmético es el que nos vendrá mejor a la hora de armar nuestra rutina de skin care, buscaremos que nos gustaría mejorar y cómo hacerlo de buena manera, es por eso que te invito hoy a realizar el cuestionario de los tipos de piel (link) y atentos a los próximos blog donde descubriremos cuales son los principios activos que nos ayudaran a cada uno.

¿Y tú ya sabes qué tipo de piel tienes? ¡Si aún te quedan dudas escríbenos!